jueves, 5 de enero de 2012

COMO SALDAR TUS DEUDAS‏


Como Saldar Tus Deudas
Muñeca Geigel
El pago de tus deudas es uno de los requisitos fundamentales para prosperar.
Aquellos que están en deuda han utilizado mal el crédito, que es un gran regalo para el éxito financiero si se utiliza con Sabiduría.
Quien abusa del crédito se encamina al desastre económico. No utilices el crédito en desesperación o para posponer la decisión de
ordenar tus finanzas y dejar circular el dinero antes de tenerlo manifestado.

Ahora mismo toma la decisión de no usar tu crédito irresponsablemente para adquirir cosas que luego te van a crear angustias y
resentimientos porque los debes.
El crédito utilizado con sabiduría te ayuda a prosperar. Nunca incurras en obligaciones si tienes miedo y sientes limitación y escasez.
Cuando responsablemente sabes que si puedes cumplir con tu obligación sin lucha ni esfuerzo, entonces puedes hacerlo en Paz Interior
sintiéndote pleno.

El Pensamiento de deudas genera miedos, y nos hace sentir agobiados, cansados y cargados. Esta actitud causa bloqueos de energía
que no permiten el fluir natural y armónico de dinero en nuestras vidas. Esta actitud de miedo ante las deudas lleva a las personas al
pánico y a paralizarse sin saber que dirección tomar.

Es fundamental soltar el pensamiento de deudas eligiendo el Orden en todos nuestros asuntos financieros utilizando los siguientes
decretos:
“El Orden Divino se establece en todos mis asuntos financieros y todas mis deudas se resuelven en el Perdón. El Amor perdonador
y prosperante de Dios a través de mí, resuelve creativamente todas mis obligaciones financieras”
Gracias.

“Yo, doy gracias al Amor Divino por el pago inmediato y total de mis obligaciones Aquí y Ahora, y en Paz Interior”.

“Yo suelto y dejo ir toda atadura que me mantiene endeudado para que Yo y mis deudores seamos prósperos y caminemos en Paz hacia
nuestro mayor bienestar Aquí y Ahora”.

“Todas las personas y todas las cosas me hacen prosperar Aquí y Ahora. Yo hago prosperar todo a todos con mi pensamiento de abundancia.
Yo uso el Poder Prosperador de la sabiduría, amor, gozo y buen juicio, para resolver todos mis asuntos financieros. Aquí y Ahora”.

El uso creativo del crédito es una gran ayuda para prosperar, pero no se puede utilizar el crédito para crear más deuda. No utilices el crédito
si te produce un sentimiento de escasez y limitación. Solamente utiliza el crédito cuando te sientas en Paz y totalmente capaz de cumplir tus obligaciones sin lucha ni esfuerzo.

El resentimiento y el miedo causan deudas. Para mantenernos sin deudas nuestra actitud debe ser optimista, con pensamientos altos, libres
de miedos, resentimientos y críticas.

Activa tu confianza y pon tu Fe en acción.
Afirma por ejemplo:
“La misma Confianza Divina que motivó esta transacción de dinero, está activándose entre nosotros en este instante Santo, para que se
resuelva esta obligación, para el mayor bienestar de todas las partes envueltas.
Gracias Dios en mí por mi confianza y mi Fe”

El miedo y la desesperación nos mantienen endeudados.
Cuando nos sintamos atemorizados, afirmemos:
“Hay una Solución Divina a este conflicto. Yo se lo entrego a Dios en mí que perfecciona todo aquello que me concierne”.

“Gracias a Dios por la restauración total de todos mis asuntos financieros, mi negocio es guiado hacia la Prosperidad por tu Sabiduría Perfecta,
con los resultados perfectos en todas las nuevas transacciones sin lucha ni esfuerzo.
Todas mis obligaciones financieras se cumplen a tiempo, de la forma más divina, ordenada y perfecta.
Gracias Dios porque esto es así. Aquí y Ahora”.

Y ya no hables de tus deudas.
Habla únicamente en términos de Prosperidad.

Reconoce que nada ni nadie puede retener el bienestar que te pertenece por derecho de conciencia. Solamente tu pensamiento te
mantiene en deuda.
Por lo tanto puedes decretar:
“Yo hago circular mi dinero creativamente y este regresa a mí multiplicado”.

Recuerda siempre que es más fácil crear dinero cuando uno sabe para qué lo quiere, cuándo y cuánto quiere.

Que tengas días llenos de prosperidad, felicidad y armonía.

Muñeca Geigel